Comenzó el Torneo por Equipos preferido por la mayoría de jugadores en Asturias. Como sabéis, este año tenemos cambio de formato en la competición, dividida ahora en 5 categorías, al separarse los filiales de los equipos matrices: División de Honor, 1ª división, División de Honor de Filiales, 1ª División de Filiales y Segunda Categoría.
En el Valdesva tenemos dos equipos, el “A” – Los Dragones, en 1ª División. El “B” – Los Lobos, en 1ª División de Filiales. En esta jornada los Lobos viajaron a Gijón y perdieron claramente por 4.5-1.5 ante el joven pero buen equipo del A.Rico “C”. En Trevías, los Dragones se impusieron también 4.5-1.5 al San Juan Bautista.
Nos visitó el sábado en Trevías el otro equipo del Occidente del Ajedrez Asturiano, el San Juan Bautista de Cangas del Narcea. En buen ambiente se jugaron las partidas y el equipo ganó claramente, 4.5-1.5, aunque la primera ronda siempre es complicada y más para un equipo como el nuestro, dónde muchos jugamos pocas partidas al año.
El primero en ganar fue Raúl, que se enfrentó con negras a un sistema Colle en el que ambos jugadores sacaron sus piezas de forma tranquila y se enrocaron en corto. El negro jugó e5 para abrir el centro aprovechando que tenía mejor desarrollo y tras una imprecisión del blanco, Raúl jugó una muy buena secuencia de jugadas que, aprovechando la debilidad de la primera fila, forzó a su rival a abandonar al dar mate a la siguiente con la dama negra. ¡Muy bien! Poco después ganó Chuso, que jugó contra una apertura inglesa dónde pronto se cambiaron los alfiles de casillas blancas y las damas. Se cambiaron también dos pares de piezas menores, el negro se infiltró con sus torres por la columna “a” y tenía ligera ventaja. Crespo Arce quiso reubicar su caballo, pero Chuso lo cambió por su alfil, dobló torres en segunda y ganó un peón tras el cambio de torres. Pudo ganar un segundo peón, pero se lió y al final no lo hizo, llegándose a un final de 5 peones contra 4, todos en el flanco de rey. Su rival no defendió del todo bien y Chuso tras muchas maniobras consiguió ganar un segundo peón y con los dos peones de ventaja, ganó la partida.
Alberto, de blancas, jugó su inglesa y siempre pareció mejor desde el medio juego. El negro no encontraba el plan y el blanco jugó bien, abrió la columna “b” y colocó una torre en séptima. La posición era equilibrada, pero tras una buena táctica de nuestro jugador, el blanco ganó dos peones. En el final, Piris quizá pudo defender mejor, pero decidió mover su rey hacia el centro del tablero y recibió un curioso mate. Con el marcador 3-0, Pablo en el tablero 1 jugaba contra un dragón acelerado de José Luis. El negro jugó un prematuro d5 y el blanco ganó un peón y se aferró a él durante el comienzo del medio juego. Cuando había pasado lo peor y podría tener una buena posición, el negro sacrificó una calidad y sus piezas se activaron, aunque objetivamente el blanco estaba aún mejor. Pero Pablo no hizo el mejor plan, cambió el alfil por el caballo y no jugó preciso, así que tuvo que dar un peón de vuelta para cambiar damas y en un final de dos torres contra torre, alfil y dos peones de más del negro, la cosa no estaba nada clara. El negro perdió un peón y tras unas cuantas jugadas, se firmó el empate que daba la victoria en el encuentro.
Quedaban Santi y Martien, ambas partidas al final acabaron en tablas. Santi jugó contra una defensa moderna y pronto pudo jugar un e5 que condicionó todo el juego negro. El blanco estaba mejor, más espacio y con opciones de atacar, pero no encontró el plan claro y pareció que no apretó el acelerador, siguió mejorando sus piezas pero sin amenazas claras. Con poco tiempo en el reloj de ambos jugadores, Elpidio cambió algunas piezas y mejoró poco a poco su posición. Se cambiaron las damas y el negro ganó un peón. Con mejor posición del jugador visitante y segundos en el reloj, se firmó el empate. Martien jugó una siciliana con negras y Robles plantó una estructura Maroczy en la apertura, estando durante la apertura ligeramente más cómodo el blanco. La partida siempre estuvo muy equilibrada, se cambiaron alfil y caballo por bando, pero la posición seguía sólida para el negro, pero equilibrada. El negro lo intentó, abrió el centro y se cambiaron las torres y luego las damas, para llegar a un final dónde Martien ganó un peón cambiando el último par de torres y llegándose a un final de caballos. El blanco defendió bien, se fueron cambiando peones y cuando le quedaban 2 al negro, el rey blanco iba a capturar uno de ellos y el caballo se sacrificó por el otro, acabando la partida en empate.
Buena victoria para comenzar, el próximo sábado viajamos a Gijón a jugar contra el Alfil A.
Están nuestros “Lobos” en la 1ª división de Filiales, a priori categoría complicada para los nuestros, pero bueno, a disfrutar y a aprender. Viajamos hasta Gijón para enfrentarnos al joven pero buen equipo del Antonio Rico C y perdimos bien, 4.5-1.5. No es el mejor comienzo, pero hay que seguir.
Alfonso, de negras, jugó contra un esquema de dama tipo Catalán de Samuel y tras la apertura la posición estaba igualada. Por la columna “c” se cambiaron todas las torres y la partida era de muchas maniobras con las piezas menores, pero sin claridad de ningún jugador. Alfonso se expandió en el flanco de rey y eso le acabó costando la partida, ya que el blanco cerró el flanco de dama y luego abrió el flanco de rey, ganó un peón, luego otro y aprovechando la debilidad del rey negro, Samuel ganó la partida. Maikel jugó un sistema Londres y pronto se cambiaron las damas. Tras el desarrollo, la posición era algo favorable al blanco, ya que el negro tenía peones doblados y aislados en “b7 y b6”. Se fueron cambiando piezas menores, pero el blanco siempre estuvo apretando durante la partida. Al final se llegó a un final de dos torres y caballo por bando dónde nuestro jugador se dejó un jaque y luego un doblete a ambas torres y abandonó quizás un poco pronto, pero desmoralizado por el error propio. A veces pasa en ajedrez, a seguir peleando.
José Manuel, de negras, jugó una siciliana y jugó bien la apertura. El blanco consiguió situar un caballo en la casilla d5 pero el negro desarrolló bien y consiguió ganar el peón de e4. Se cambiaron todos los alfiles y se llegó a un final de piezas mayores y un caballo por bando, con peón de más del negro. Desafortunadamente, la foto de la planilla estaba muy borrosa y no pudimos leer como terminó, pero el jugador local terminó ganando, ¡ánimos José!
Lo mismo nos pasó con la partida de Balboa, no pudimos leer nada, pero parece que fue una larga lucha que terminó en tablas.
En el quinto tablero, llegó la única victoria de los nuestros. Eduardo jugó con negras una defensa holandesa y pronto indicó sus intenciones de atacar, ya que retrasó el enroque y jugó h6 y g5 ganando espacio. Curiosamente Aida se enrocó en corto y le dejó atacar “gratis”. Eduardo abrió la columna “h” y ganó un alfil y un peón en el ataque, que terminó con el cambio de damas. La partida siguió, el negro se enrocó largo y mantuvo un peligroso peón en h3 unas cuantas jugadas. Al final el blanco lo capturó, pero para ello tuvo que cambiar las últimas torres y permitir que el alfil rival se infiltrase en su territorio y perdió otro peón. Con pieza y peón de ventaja nuestro jugador jugó tranquilo, mejoró sus piezas y se fue comiendo peones. Al final, con cuatro peones de ventaja y el caballo, dio mate al rey blanco. Eliseo, en la 6, jugó de dama y las primeras jugadas estuvieron bien, pero sin acabar el desarrollo perdió una pieza gratis de una forma un tanto extraña… Luego siguió luchando y no jugó del todo mal, pero su rival jugó bien, fue cambiando piezas, luego las damas, luego las torres y consiguió llevar un peón hasta la segunda fila, dónde nuestro jugador tuvo que sacrificar otra pieza para evitar la promoción. Con dos piezas de menos y varios peones, Eliseo se rindió.
En el quinto tablero, llegó la única victoria de los nuestros. Eduardo jugó con negras una defensa holandesa y pronto indicó sus intenciones de atacar, ya que retrasó el enroque y jugó h6 y g5 ganando espacio. Curiosamente Aida se enrocó en corto y le dejó atacar “gratis”. Eduardo abrió la columna “h” y ganó un alfil y un peón en el ataque, que terminó con el cambio de damas. La partida siguió, el negro se enrocó largo y mantuvo un peligroso peón en h3 unas cuantas jugadas. Al final el blanco lo capturó, pero para ello tuvo que cambiar las últimas torres y permitir que el alfil rival se infiltrase en su territorio y perdió otro peón. Con pieza y peón de ventaja nuestro jugador jugó tranquilo, mejoró sus piezas y se fue comiendo peones. Al final, con cuatro peones de ventaja y el caballo, dio mate al rey blanco. Eliseo, en la 6, jugó de dama y las primeras jugadas estuvieron bien, pero sin acabar el desarrollo perdió una pieza gratis de una forma un tanto extraña… Luego siguió luchando y no jugó del todo mal, pero su rival jugó bien, fue cambiando piezas, luego las damas, luego las torres y consiguió llevar un peón hasta la segunda fila, dónde nuestro jugador tuvo que sacrificar otra pieza para evitar la promoción. Con dos piezas de menos y varios peones, Eliseo se rindió.
Mal resultado para comenzar, a seguir peleando. El próximo sábado, en Trevías, contra el Alfil B
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