En los tableros, el primero en finalizar fue Alfonso, que jugó con negras una defensa Grunfeld. Benigno también desarrolló su alfil de casillas blancas por un fianchetto en g2, y la posición estuvo igualada desde el principio. Tras completar ambos bandos el desarrollo, el negro forzó unos cuantos cambios de piezas menores a través de su casilla en d5. Tras el cambio de damas, se visualizaba un final de torres completamente igualado y se firmó el empate, ya que el resto de posiciones parecían mejores para los nuestros. En efecto, a los pocos minutos, Chuso consiguió la victoria. Con blancas, se enfrentó a una francesa de Crespo Arce y pronto se cambiaron un par de peones centrales y la posición fue la típica sin centro fijo y con mucho juego de piezas menores. El blanco tenía más espacio, pero el negro fue cambiando piezas y su posición parecía robusta. Con el cambio de damas, el dominio del blanco en la columna abierta “d” creo problemas al negro y tras conseguir invadir la séptima, Chuso ganó un peón importante en a7, dejando “a” y “b” pasados en su favor. Chuso cambió un par de torres, organizó sus fuerzas y comenzó a marchar su peón de “b” sin oposición clara y luego el de “a”. El negro no supo frenarlos y tras promocionar en dama, la partida se acabó en pocas jugadas con mate de nuestro jugador.
Con el encuentro 1.5 a 0.5 a nuestro favor, se produjo un hecho sorprendente y es que nuestros rivales nos propusieron tablas en ambos tableros, cosa que nos proporcionaba la victoria en el encuentro. Naturalmente, no lo dudamos y aceptamos, esto es la Copa y lo importante es el resultado del equipo. La partida de Pablo parecía muy de cara, ya que con negras se enfrentó a una inglesa, pero a las pocas jugadas, el blanco sacrificó una pieza a cambio de un par de jaques, pero el negro se defendió bien, logró cambiar damas y quedó con pieza de ventaja por un peón. El blanco tenía cierta actividad, pero el negro fue poco a poco completando el desarrollo y logró poner en juego sus torres y cambiar algunas piezas menores. Cuando todo parecía bien encaminado, un error grosero de Pablo hizo que perdiese la pieza de ventaja de vuelta. La partida se igualaba con final incierto, cuando llegó la propuesta de tablas. Martien jugó contra la siciliana de Blanco, variante Lasker Pelikan que transcurrió por territorios teóricos un buen rato. El blanco se expandió en el flanco de rey, pero no parecía un peligro real para el rey negro, mientras que el negro centralizó sus torres y buscaba la temática ruptura en “d5”. Con ligera ventaja negra, se firmó el empate.
Seguimos adelante en la competición, el próximo sábado en cuartos recibimos al Alfil, que consiguió vencer al Ensidesa. ¡A por ellos!
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| Así queda el cuadro |
(*)La nota negativa de la ronda fue el abandono del Antonio Rico de la competición, la misma mañana del sábado, justo antes de jugar su encuentro con el Oviedo 93 A. Una lástima
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